Me escribió que moría de ganas de volver a verme, el ego se me llenó y por una vez me sentí importante; le contesté diciendole una fecha y lugar. Cuando llegué, con toda la autoestima y mi espirítu conquistador hasta arriba, me di cuenta de que se había quedado ciega.
El principal problema del Sindrome de Peter Pan, no es ese miedo a tomar decisiones maduras o el pavor a comenzar a tomar la vida en serio; no es la necesidad de tener alguien que te contenga y te haga dejar de ser inmaduro. Ni siquiera es el evitar toda responsabilidad. El principal problema es no poder dejar de perseguir tu sombra.
Comentarios